Al salmón le gusta frío. Lo que explica por qué los peces de sabor suave abundan en los fiordos vírgenes del sur de Chile, que empezó a recoger los frutos de sus fríos mares en 1979. Hoy, el país es el segundo mayor productor y exportador mundial de salmón de cultivo. Pero para mantener su posición como proveedor de elección para los consumidores conscientes del medio ambiente, la industria acuícola chilena está recurriendo a consultorías en madurez digital.

Esa transición puede verse en la pintoresca ciudad portuaria de Puerto Montt, sede de Ventisqueros, una importante explotación salmonera que emplea a unas 1.200 personas y produce aproximadamente unas 50.000 toneladas de pescado al año. La empresa, que produce pescado sostenible para los consumidores de toda América y filetes de calidad sashimi para los mercados asiáticos, eligió recientemente a Kyndryl para apoyar el rediseño y la modernización de toda su cadena de valor.

"Nuestro objetivo es ayudar a los clientes, conectar sus objetivos estratégicos con la tecnología existente y construir una hoja de ruta", dice Giorgio Perucca, un consultor con sede en Chile para Kyndryl que se especializa en la Industria 4.0, la práctica que consiste en aplicar las tecnologías de automatización inteligente a las estrategias industriales y los procesos de negocio para impulsar una mayor eficiencia y valor. "Vamos a ayudar [a Ventisqueros] con el uso de nuevas tecnologías y datos para alcanzar sus objetivos de negocio, revisando todo el funcionamiento de la empresa incluyendo aquellos aspectos no técnicos."

El cultivo de salmón es la parte más grande de la floreciente industria acuícola y pesquera de Chile, representa casi el 50% de los 11.500 millones de dólares generados por el sector en 2018. Chile suministra casi un tercio del salmón cultivado en el mundo, frente a un 10% en la década de 1990, y las salmoneras chilenas se están posicionando cuidadosamente para el futuro centrándose en la sostenibilidad.

Las empresas de todo el mundo están modernizando su infraestructura tecnológica para operar de manera más eficiente y segura en una economía cada vez más digital, y la industria acuícola no es una excepción. En este sentido, Ventisqueros tenía especial curiosidad por utilizar plataformas basadas en blockchain para administrar datos críticos sobre sus cadenas de valor. Esto les permitiría compartir los datos apropiados de forma segura con otras partes interesadas - incluidas las empresas de sus cadenas de suministro - para mejorar la trazabilidad, la seguridad y la sostenibilidad de los alimentos.

Perucca pasó varias semanas en las granjas de Ventisqueros de la Patagonia chilena, donde conoció de primera mano todos los aspectos de la cadena de valor de la empresa, desde la compra de huevos hasta la cría y el procesamiento del salmón.

"Durante la consultoría descubrimos que Ventisqueros podía actualizar su tecnología para mejorar la experiencia del cliente y las ventas. También identificamos varias oportunidades que apoyarían la productividad y mejorarían las relaciones con las comunidades locales. También desarrollamos una hoja de ruta que permitirá comprender mejor las estrategias a corto, medio y largo plazo de Ventisqueros para abordar las tendencias comerciales en evolución", afirma Perucca. 

Ventisqueros ya recopila una inmensa cantidad de datos sobre sus salmones, incluidos sus índices de crecimiento, el color del pescado y la cantidad de antibióticos que ingieren. Kyndryl les ayudó a descubrir cómo analizar y utilizar esos datos.

"Les comentamos a Ventisqueros, ustedes ya tienen la tecnología y los datos, ¿cómo podemos trabajar juntos para sacarle el principal valor? ", dice Perucca. "El desafío no era la tecnología, sino relacionar la tecnología con las necesidades del negocio para construir una hoja de ruta holística que estuviera alineada con los objetivos estratégicos actuales y futuros. Para lograr esto debíamos ocuparnos de la parte tecnológica, como también de todas las otras áreas que intervienen con la tecnología. Es por ello que realizamos una consultoría holística estratégica de innovación que incluyó áreas como manejo de la calidad, de la innovación, de la comunicación, de recursos humanos, entre otras. Como resultado, se le entregó a Ventisqueros una clara hoja de ruta para los próximos 3 años en relación a madurez e innovación digital bajo diferentes dimensiones."

Nuestros expertos en Servicios de Asesoramiento e Implementación ayudaron a ofrecer puntos de mejoras en sus cadenas de suministro a fin de lograr mayor flexibilidad junto con supervisión de elementos de producción cruciales, como la producción y el engorde del salmón, para satisfacer la demanda siempre más exigente de los consumidores.

"La misión de Ventisqueros es seguir siendo un destacado productor de salmón boutique", afirma el director general José Luis Vial. "Con el apoyo del equipo de consultores de Kyndryl, realizamos y desarrollamos un diagnóstico exhaustivo para la madurez digital de la empresa que nos permitirá seguir ofreciendo productos y mejorar nuestra cadena de producción para cumplir y aumentar nuestros estándares de sostenibilidad".